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Hace medio siglo, una pareja emprendedora, Mesías Sánchez y Vilma Ceballos, partieron de su natal Ambato con una receta y un sueño. Su destino: Puyo, la puerta de entrada a la Amazonía ecuatoriana. Su misión: compartir el sabor de un plato que se convertiría en una tradición culinaria en esta ciudad – la caucara.
La caucara es un manjar que fusiona la herencia española con la riqueza de la gastronomía local. Este plato se centra en la carne de res, un animal que fue introducido al continente por los colonizadores españoles, y se realza con especias y guarniciones autóctonas, como el achiote y la papa.
El término "caucara" es un homenaje a la lengua kichwa, donde "Cau" significa "a punto de madurar" y "cara" se traduce como "cuero" o "pellejo". La carne de caucara, extraída del pecho de la vaca, es conocida por su textura firme, lo que le ha ganado el apodo de "carne dura".
Mesías y Vilma perfeccionaron la técnica de preparar la caucara durante décadas. La carne se cocina lentamente, ya sea frita o en estofado, para ablandar su textura y permitir que los sabores se intensifiquen.
Para acompañar este exquisito plato, se sirven los tradicionales llapingachos, tortillas de papa con queso, junto con una nutritiva ensalada de remolacha cocida y la indispensable salsa de ají, que aporta un toque picante.
Aunque ahora Doña Vilma ya no está con nosotros, su fallecimiento dejó un vacío que Don Mesías trata de llenar, el ha visto cómo su platillo ha ganado fama y se ha convertido en parte del tejido cultural de Puyo. Los residentes y visitantes por igual buscan las caucaras de Doña Vilma, atraídos por su fama y el sabor auténtico que han mantenido a lo largo de los años.
Al celebrar el legado de Doña Vilma Ceballos, los invitamos a visitar Puyo y el Barrio Cumandá para experimentar de primera mano la delicia de la caucara, un plato que no solo nutre el cuerpo sino que también alimenta el alma con su rica historia y tradición.
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